
Si solo tenéis un día para visitar Bremen, no os preocupéis, es suficiente y para haceros la vida mas fácil hemos preparado esta ruta que está pensada para que veáis lo más destacado sin dar muchas vueltas. Los puntos del recorrido están ordenados para ofreceros un itinerario lógico y atractivo que recorre la ciudad desde la estación hasta el río y se adentra en sus barrios más emblemáticos.
Estación Central de Bremen (Hauptbahnhof)
El Hauptbahnhof, fue reconocido en 2012 como la estación de ciudad más bella de Alemania, ya solo con eso seria motivo suficiente para dedicarle una visita. La estación fue diseñada por Hubert Stier y construida entre 1886 y 1889. Se trata de un imponente edificio de estilo neorrenacentista con relieve alegórico que simboliza la industria, el comercio, el ferrocarril y la navegación. Esta situada al noreste del casco histórico, y es sin duda un buen punto de partida para recorrer la ciudad. Durante la guerra no fue destruido completamente y conserva mosaicos interiores recuperados de los años 50.

Molino de Bremen (Mühle am Wall) y Jardines de las Murallas (Wallanlagen)
La Mühle am Wall es un molino de viento típico holandés en el medio de Bremen, así como lo oís. Fue construido en 1898 sobre las antiguas fortificaciones que rodeaban Bremeny formaba parte de una cadena de molinos que había en el perímetro defensivo. Años mas tarde, tras su restauración, hoy alberga Beck’s Mühle, un restaurante acogedor que sirve platos regionales como el Bremer Knipp o Labskaus hasta las 21:00 h.

Los Wallanlagen son jardines amplios y muy cuidados que se extienden donde antes hubo murallas medievales. Aunque no se conservan completas, varios tramos del antiguo trazado son visibles en los taludes, caminos y desniveles del parque. No hay acceso a estructuras interiores como torres o muros defensivos visitables, pero pasear por los Wallanlagen permite hacerse una idea bastante clara de por dónde transcurría el perímetro de la Bremen medieval.
Calle de los Cerdos (Sögestraße)
La Sögestraße, conocida como la “calle de los cerdos”, fue tradicionalmente una vía de acceso al mercado de ganado, de ahí su nobre. Hoy es una de las principales calles comerciales, llena de tiendas, cafés y buen ambiente local.
Plaza de la Catedral (Domshof)
En la Domshof, la plaza de la catedral, se extiende un amplio espacio abierto que ha servido históricamente como lugar de mercado y centro de la vida cívica. Frente a la catedral, destaca una losa negra en el pavimento:
La Piedra del Escupitajo (Spuckstein)
Marca el lugar donde en 1831 fue decapitada Gesche Gottfried, la última persona ejecutada públicamente en Bremen por haber envenenado a quince personas. La gente escupió ese punto durante años en señal de repudio, y aunque hoy en día ya no es una práctica común, todavía hay quienes continúan la tradición y lanzan un escupitajo simbólico al pasar por allí.
Plaza del Mercado (Marktplatz)
La Marktplatz es el corazón urbano: lugar de mercados solemnes, actos festivos y vivencias cívicas desde la Edad Media. Rodeada de edificios emblemáticos, es espacio imprescindible para comprender el poder de la antigua ciudad hanseática.
Ayuntamiento (Rathaus)
El ayuntamiento de Bremen es, junto con la catedral, uno de los mas destacados de la plaza. El edificio es una joya gótica-renacentista declarada Patrimonio de la Humanidad. Podéis visitarlo por dentro con un tour guiado en inglés o alemán que te lleva por sus estancias más destacadas. La visita incluye la impresionante sala gótica, con su techo abovedado, así como las cámaras de representación, utilizadas durante siglos para reuniones oficiales y eventos diplomáticos. Durante el recorrido descubriréis la historia comercial de Bremen, su relación con la Liga Hanseática, ademas os contarán los detalles artísticos que adornan cada rincón del edificio.

Bodega del Ayuntamiento (Ratskeller)
Una de las visitas mas curiosas es el sótano del ayuntamiento, donde se ubica el Ratskeller, una histórica bodega-restaurante con más de 600 años de historia, considerada una de las más antiguas de Alemania. Con un ambiente elegante alberga una extensa colección de vinos alemanes, muchos de ellos exclusivos. Además de ser un restaurante en funcionamiento, el Ratskeller también funciona como bodega-museo, donde se pueden realizar visitas para ver sus salas abovedadas, sus barricas centenarias y curiosidades como la botella de vino más antigua del lugar. Abre aproximadamente de mediodía a las 21:30 y es posible reservar mesa o visitar la bodega en horario turístico para probar especialidades locales.
Estatua de Rolando (Roland)
Desde el siglo XV la estatua de Rolando, junto al ayuntamiento, simboliza la libertad y los derechos cívicos de Bremen como ciudad libre e independiente dentro del Sacro Imperio Romano Germánico.
Durante la Edad Media, muchas ciudades del Imperio como Bremen luchaban por mantener cierta independencia frente al poder feudal, obispal o imperial. El derecho a ejercer justicia y autogobierno, es decir, a tener sus propios tribunales, promulgar leyes locales o recaudar impuestos sin depender directamente del emperador ni de un señor feudal. Este era un privilegio muy valioso, especialmente para ciudades comerciales importantes.
La estatua de Rolando se alzaba como símbolo del derecho a celebrar juicios y ejercer autogobierno sin intervención de autoridades externas, valores profundamente arraigados en la historia de la ciudad desde la Edad Media, que se han mantenido hasta nuestros días ya que Bremen sigue siendo una ciudad con un estatus especial dentro de Alemania. Es uno de los 16 estados federados del país (el más pequeño junto con Bremerhaven, que forma parte del mismo estado) y mantiene un alto grado de autonomía política.
Según la leyenda, mientras la estatua permanezca en pie, Bremen será libre, y por eso ha sido cuidadosamente conservada y restaurada a lo largo de los siglos como emblema de la identidad local.
Estatua de los músicos de Bremen
La escultura de los Músicos de Bremen representa a un burro, un perro, un gato y un gallo apilados. Basada en el cuento de los hermanos Grimm, que narra la historia de cuatro animales que, tras ser maltratados por sus dueños, huyen en busca de una nueva vida como músicos en Bremen. Aunque nunca llegan a la ciudad, encuentran un hogar y una segunda oportunidad en una casa del bosque que logran ocupar tras asustar a unos bandidos.

Veréis que las patas del burro están desgastadas y es que se cree que tocar las patas delanteras del burro trae buena suerte. Sin duda una de las fotos más icónicas de la ciudad.
Casa de los Comerciantes (Haus Schütting)
La Haus Schütting, es la antigua sede del gremio de comerciantes. Tiene una fachada barroca impresionante. Se encuentra en la plaza del mercado. Aunque no se visita por dentro, su exterior vale la pena admirarlo.
Un edificio llenos de historia pero una de las más llamativas es que, durante los trabajos de restauración, se descubrieron pasadizos y cámaras ocultas que podrían haber servido como espacios de almacenamiento secreto o como refugio durante periodos de conflicto.
Catedral de San Pedro (St‑Petri‑Dom)
La catedral de San Pedro es otro de los imponentes edificios de la Plaza del Mercado. Data del siglo XI y mezcla estilo románico y gótico. Hay varias opciones para conocer el interior, normalmente suelen ser en alemán o inglés y podréis acceder a zonas restringidas del templo, incluyendo la cripta, el órgano histórico y algunos restos arqueológicos.
Pero si prefieres visitarla por vuestra cuenta, podéis hacerlo gratis durante el horario de apertura de la catedral, generalmente de lunes a sábado de 10:00 a 17:00 y domingos a partir de las 14:00, aunque os recomendamos mirar los horarios actualizados ya que pueden variar según la época del año o celebraciones litúrgicas.
Cripta de las Momias (Bleikeller)
Bajo la catedral se encuentra el Bleikeller, unas criptas donde descansan momias naturales descubiertas en el siglo XVII. El nombre proviene del uso de planchas de plomo («Blei» en alemán) que, combinadas con la baja humedad del lugar, permitieron la momificación natural de los cuerpos sin intervención artificial. Durante siglos, estas momias fueron objeto de curiosidad, mitos y leyendas locales. Hoy en día, el espacio se puede visitar como parte de un tour combinado con la catedral. Sin duda, es uno de los lugares más inquietantes y fascinantes de Bremen. El tour combinado con el dom cuesta unos 9 € y ofrece 1 € de descuento con la BremenCARD. Abre martes a domingo, horarios según temporada.
Calle Böttcher (Böttcherstraße)
La calle Böttcherstraße, construida en los años 20, es un ejemplo de arquitectura expresionista con galerías, tiendas de artesanía y museos. A lo largo de esta corta pero intensa calle peatonal encontrarás comercios especializados en productos locales, talleres de artistas, cafeterías con encanto, pequeños restaurantes e incluso una chocolatería muy conocida llamada Hachez, una histórica marca de Bremen especializada en chocolate artesanal desde 1890. La calle es un lugar donde el arte se mezcla con la vida diaria y la actividad comercial, siendo una de las mas famosas de Bremen, Ademas hay unos cuantos puntos de interés turístico que debéis visitar.
Carrillón (Glockenspiel) y paneles Ozeanbezwinger
En plena Böttcherstraße se encuentra un carrillón que se activa a ciertas horas (12:00, 15:00 y 18:00), las once campanas de porcelana giran suavemente para tocar las melodías mientras al mismo tiempo, se despliegan unos paneles de madera con relieves giratorios que ilustran las hazañas de famosos navegantes y exploradores como Cristóbal Colón o Amundsen. El espectáculo dura unos pocos minutos.
Fuente de los Siete Perezosos (Sieben‑Faulen‑Brunnen)
Es una fuente que está ubicada en un tranquilo patio de la Böttcherstraße y representa en bronce a siete personajes, perezosos. Según una leyenda fueron unos estudiantes que regresaron de la universidad sin haber aprendido nada útil. Sin embargo, su pereza resultó ser una virtud: al no querer enfrentarse a los problemas de la ciudad con soluciones imposibles, acabaron proponiendo ideas prácticas que realmente funcionaron. La Fuente de los Siete Perezosos combina arte, ironía y tradición local, siendo un símbolo del ingenio bremense.
Casa de las Campanas (Haus des Glockenspiels)
La Casa de las Campanas (Haus des Glockenspiels) no solo alberga el famoso carrillón de porcelana de Meissen, sino que forma parte del conjunto arquitectónico ideado por el empresario Ludwig Roselius, impulsor de la transformación de la Böttcherstraße en un centro cultural. Su diseño responde a los ideales del expresionismo alemán de entreguerras, combinando arte, música y arquitectura en un mismo espacio. Aunque a simple vista parece un edificio más, su fachada alberga las campanas del carrillón, y desde su interior se coordinan los mecanismos que activan tanto las melodías como los paneles giratorios del espectáculo. Así que sí, está directamente vinculada al carrillón, y representa el corazón simbólico y artístico de la calle.
Paseo fluvial Schlachte (Schlachte) a orillas del río Weser, con parada en un Biergarten
El Schlachte es un paseo junto al río donde puedes tomar un crucero por el río de Bremen, el Weser (duración desde 45 min hasta tours más largos) o simplemente disfrutar de las vistas. Los precios varían, típicamente desde unos 10 € por persona, según la duración. También hay varios biergarten (cervecerías al aire libre); recomendamos una junto al río donde probar cerveza local.
Barrio Schnoor (Schnoorviertel) – laberinto medieval
El Schnoorviertel es el barrio más antiguo de Bremen y uno de los más encantadores. Sus callejuelas estrechas, muchas de ellas del siglo XV y XVI, están repletas de casas pintorescas que parecen sacadas de un cuento. Hoy en día, este laberinto medieval está lleno de vida: encontrarás tiendas de artesanía, galerías de arte, cafeterías, pequeños museos y la famosa tienda de Navidad abierta todo el año, repleta de adornos tradicionales alemanes. Uno de sus rincones más curiosos es la calle más estrecha de la ciudad, donde apenas cabe una persona.

El Barrio (Das Viertel · Ostertor‑Steintor)
Para cerrar el día, teneis que ir a Das Viertel (también conocido como Ostertor-Steintor) un barrio alternativo y vibrante que destaca por su ambiente bohemio, calles llenas de bares independientes, cafeterías de autor, tiendas vintage, librerías, galerías de arte contemporáneo y pequeños teatros. Además de su oferta cultural y gastronómica, es un lugar ideal para sumergiros en la vida cotidiana de Bremen, lejos de los circuitos más turísticos. Por la noche, las terrazas y locales estan llenos de vida local.