En nuestro primer día en el Tirol vamos a conocer la zona de los Alpes austriacos situada al este de Innsbruck. Primero recorreremos la carretera alpina más famosa de Austria, la carretera Grossglockner con la que llegaremos hasta el glaciar Pasterze. De vuelta al hotel visitaremos las impresionantes cascadas Krimml, unas de las más altas de Austria.
Grossglockner, la carretera alpina mas visitada
Como llegar a Grossglockner
Para llegar al inicio de la ruta alpina, primero teníamos que llegar hasta Innsbruck para tomar la carretera A12 en dirección Dechant-Wieshoferstraße. Tras 120 llegamos al pueblo Saalfelden am Steinernen Meer donde continuamos por la carretera 311 hasta llegar a Zell am See. En este punto es donde empieza la carretera alpina. Podréis encontrar mapas de la carretera en carteles por el pueblo, aunque es muy sencillo. Solo hay cruzar el pueblo hasta el cruce con la carretera 168 y girar para continuar por la 311 que no lleva directos al peaje. El peaje son 37€ por coche y 27€ si viajas en un coche eléctrico, para todo el día. Si vas a estar por la zona un par de días existe la opción de ampliar el peaje a un segundo día por 12.5€ más. En el caso de que vayas a estar más días circulando por la carretera existe un bono de 3 semanas por 59€ y un pase de temporada por 89€
Las casas rodantes tienen un tratamiento especial, hasta 3500kg son consideradas como un coche. De 3500kg a 7500kg entran en la categoría de camión 1, por lo que el peaje seria 46€ por dia. A partir de 7500kg entran en la categoría de camión 2 y tendrían que pagar 118€. Si viajáis en uno de estos vehículos no os preocupéis por el estado de las carreteras, porque en todo el país son unas carreteras fantásticas.
Puntos de interes en Glossglockner
La carretera Grossglockner transcurre a lo largo de 48 km por el Parque Nacional de Hohe Tavern. Cruzando los impresionantes Alpes austriacos mientras se disfruta de las increíbles vistas de glaciares, lagos, fauna y unas vistas impresionantes en cada curva de la carretera.
Nuestra recomendación es que paréis todas las áreas de descanso que veáis para disfrutar de las vistas que cada punto ofrece. Destacan algunos puntos en la carretera.
La primera parada que nos encontramos es el Großes Wiesbachhorn, uno de los magníficos miradores que vamos encontrando a lo largo de toda la ruta. Además, en esta zona se puede hacer un trekking para visitar la cascada Erlebnisweg.
Después de esta parada comienzan las curvas que han convertido en esta carretera en una de las más famosas del país y de la más visitada por ciclistas y motoristas.
A unos 12 km llegamos a la zona de Oberes Nassfeld. Posiblemente esta sea la parte más llamativa de todo el trayecto por la carretera de Grossglockner, el ascenso hasta llegar a él mirado Seidlwinkel es una maravilla. Pero las vistas desde el mirador te dejarán con la boca abierta.
La ruta continua hasta llegar al lago de alta montaña Fuscher, donde con un poco de suerte puedes encontrarte con algún representante de la fauna de la zona.
Continuamos por la carretera hasta encontrarnos con una rotonda de la que sale la carretera que nos lleva al glaciar Pasterze. De Camino al glaciar nos encontramos con una parada obligatoria, la cascada Energiedusche. Se ve desde la carretera y hay una pequeña zona de descanso para no tener que parar en mitad de la carretera.
Por fin llegamos a la zona de parking para ver el glaciar Pasterze, una maravilla de hielo de más de 8 km que se desliza bajo la montaña más alta del país. El lugar es perfecto para sacar los bocadillos y disfrutar de las vistas.
Cascada Krimml
La próxima visita del día estaba de camino a Innsbruck. Desde el glaciar tenemos dos opciones para llegar a las cascadas Krimml. Se puede volver por el mismo camino o continuar por la carretera 107 hasta llegar a Lienz para coger la carretera 108 que te lleve de vuelta a la carretera 168. La diferencia es una media más si se va hasta Lenz. Nosotros decidimos volver por la carretera Grossglockner y así poder disfrutar de las vistas al circular en la otra dirección.
Las cascadas se encuentran en el Parque Nacional de Hohe Tauern a un hora y media de Innsbruck. El precio para entrar en la zona de las cascadas es de 4€ por adulto, pero sin duda merece la pena.
Hay varios parkings para dejar el coche, el precio por aparcar es de nos 3€. Cuando nosotros llegamos era un poco tarde y ya no había casi nadie de modo que no tuvimos problemas para aparcar. Desde el parking hay un pequeño paseo para llegar a la base de la cascada. Recordar llevaros un chubasquero o terminareis empapados.
A medida que te vas acercando se escucha el ruido de la cascada y empiezas a ser consciente del tamaño de la cascada. Krimml con sus 380 m de cascada en tres tramos es la cascada más alta de Austria.
Se puede subir hasta la cima de la cascada por un sendero que esta perfectamente acondicionado y que tiene varios miradores para hacer fotos de la zona. La subida hasta arriba lleva unas 2 horas, pero sin duda merece la pena.
A poca distancia y justo en la montaña de enfrente existe otro mirador al que se puede llegar en coche y que tiene una vista distinta de la cascada.